TE MARCHASTE
12….
Quisiera llorar tu muerte como lo ha
hecho otra gente, en lugar de por mi suerte al sentirme abandonado.
Si la muerte hubiese llegado y en sus
brazos te hubiere llevado, podría entonces llorar por no tenerte a mi lado.
Si te hubieses ido con alguien, como
lo han hecho otras gentes, podría entonces llorarte y culparme por perderte.
Mas no te puedo llorar porque rompiste
mis sueños, por no cumplir la promesa de envejecer a mi lado, cumpliendo lo
prometido, por los dos hace mil años,
malcriar a nuestros nietos o solo
verlos crecer, envejecer viendo crecer a aquellos que hoy te lloran, por no
poder comprender el porqué de tu partida.
Si no querías seguir por el amor apagado,
o si en brazos de otro hombre de mi te
hubieras marchado, no sería tan profundo el dolor que siento hoy, hoy lloro
bronca, dolor, lloro por tanto egoísmo, jamás podré perdonarte que te quitaras
la vida, porque tampoco era tuya, a mí me pertenecía.
Ya a todos los que tu falta, lloran
pues te querían, les sanarán sus heridas porque es la ley de la vida.
Mas yo jamás dejaré, de gritarte entre
silencios, que es muy cruel el alto precio que pago por mis pecados.
Ojalá que Dios exista y te perdone por
esto, ojalá que te cobije como dicen quienes creen, pero mi gran ignorancia no
me permite creer y jamás te perdonaré por dejarme de ese modo.
Me siento decepcionado, tal vez hasta
traicionado, no creo llegar a odiarte pues
debe haber un porqué, que jamás conoceré por mas que busque entre líneas.
Tu te llevaste un secreto que no debía
existir, pues siempre, por treinta años pensé que no los había.
No sé qué hacer con mi rabia, no sé si
odiarte es la cura, mas presiento que la locura me está golpeando la puerta, dudo
de estar alerta o dejarla bien abierta, pero temo que la locura sea peor que la
muerte y por culpa de mi suerte sean otros los que paguen.
Te prometo que no iré tras de ti por
mucho tiempo y si muriera de pronto y tuviera que encontrarte, te aseguro que
la espalda te daría en ese instante.
Hoy trataré de seguir viviendo sin tu
presencia, recordando nuestra esencia o lo que creí tener, el fruto de mi
existencia se verá cuando termine, espero morir de muerte, no de rencor o dolor
y espero que cuando muera nadie se culpe de ello
pues es muy fuerte la duda que
sembraste con tu muerte.
Yo me pregunto en las noches y te
reprocho en silencio ¿Porque tu vida truncaste si aun no era la hora?,
Intenté ser compañero y hasta creí que
lo era, en torno a vos fue mi vida, en torno a vos mi existencia
Sé que a veces te fallé, que no fueron
primaveras, todos los días vividos, todas las horas pasadas, mas si miraras
hacia atrás y no olvidaras vivencias, jamás fueron tan malas las horas que
compartimos.
No creo llegar a odiarte por irte así
de ese modo, mas no podré perdonarte pues no tu vida tronchaste, sino la mía
también, me abandonaste a mi suerte, entregándote a la muerte sin explicarme el
porqué.
Si querías lastimarme por motivos que
yo ignoro, te aseguro que triunfaste, porque sí, que lo lograste
Trataré de apartarte de mis sienes en
futuro, pero tenlo por seguro que aunque vuelva a enamorarme, jamás podré
desprenderme de los años que vivimos
y aunque odie lo que hiciste, jamás
lograré olvidarte
Julio Madriaga
Pasaron ya trece años.....